martes, 14 de mayo de 2013

EL ESTRÉS

El estrés es una reacción natural del organismo ante las presiones, pero si no se controla puede afectar gravemente la salud.

En cualquier problema de salud actual o cualquier situación que nos ocasiones temor, inseguridad, angustia, o ansiedad, sale a relucir la palabra estrés y aunque todos hablamos de este fantasma que afecta a todo tipo de personas, no sabemos bien qué es.

El estrés no es una enfermedad, se define como una respuesta normal del organismo ante cualquier situación que altera el equilibrio emocional de una persona y se presenta en cualquier etapa de la vida desde la infancia.

Las reacciones por estrés permiten evitar el peligro, pero cuando este persiste, o no se controla adecuadamente o se convierte en parte de nuestro estilo de vida, es muy perjudicial para la salud física, mental y social ya que ocasiona principalmente mucha fatiga y la incapacidad de actuar adecuadamente.

Durante esta reacción, se activa la liberación de neurotransmisores cerebrales, hormonas como la adrenalina y otros elementos corporales que inician una reacción en cadena provocando el aumento de los niveles de alerta, la transpiración, el aumento de la presión arterial y la sangre desviada de los intestinos a los músculos al mismo tiempo que el nivel de insulina aumenta para permitir que el cuerpo metabolice más energía.

Cuando el estrés aumenta, intervienen casi todos los órganos y funciones del cuerpo, incluidos entre otros órganos el cerebro, el sistema nervioso, el corazón, el flujo sanguíneo, los niveles hormonales, el proceso digestivo, el sistema excretor, la función muscular, el páncreas y el hígado.

Entre los daños que el estrés puede ocasionar y/o complicar están las enfermedades cardiovasculares, la artritis reumatoide, migrañas y dolores extremos de cabeza y músculos del cuello y espalda principalmente, calvicie, asma, tics nerviosos, impotencia sexual, irregularidades en el ciclo menstrual, colitis y gastritis, diabetes, pérdida o aumento de apetito, disminución o aumento de peso.

Pero también el estrés ocasiona problemas emocionales que repercuten en las relaciones familiares, laborales, escolares ya que no nos deja pensar claramente, hay un fuerte desequilibrio emocional que provoca enojo, bloquea las ideas,y la productividad, preduce miedo y se puede manifestar hasta en conductas violentas en muchas ocasiones.

Origen un causas del Estrés:

El problema del estrés es muy complejo, pero cada vez más preocupante, por un lado, porque es un factor de riesgo presente en muchos problemas de salud, pero por otro lado, porque los problemas de salud suelen agravarlo, lo que hace que este padecimiento sea un círculo vicioso, en ocasiones difícil de controlar.

Muchos son los problemas de salud graves relacionados directamente con el estrés, entre ellos están: las adicciones, la depresión, la hipertensión, los infartos, los trastornos alimenticios como la bulimia y la anorexia, la violencia o los suicidios.

Otro de sus graves problemas es que puede ser ocasionado por cualquier situación o acontecimiento que represente un peligro para la estabilidad y equilibrio emocional de una persona y que es una problema muy individual, ya que aunque varias personas sufran la misma situación, cada persona la asume, enfrenta y reacciona de forma diferente a ellas, es decir la trascendencia y significado es diferente para cada uno, y lo que para algunas personas es insignificante, a otras les genera mucho estrés y más cuando se sienten incomprendidos ante alguna situación.

El estrés además puede ser originado tanto por eventos positivos, como negativos. Entre los primeros están por ejemplo: el nacimiento de un hijo, una boda, un cumpleaños, el examen de titulación, la llegada de un pariente querido, un viaje y hasta el obtener un premio en algún sorteo.


Entre los negativos están por supuesto las enfermedades y los accidentes, la muerte de familiares y amigos, las deudas económicas, la pérdida de empleo, la fatiga física y corporal, los conflictos con las parejas sentimentales o los divorcios, los problemas con los hijos, con los jefes o compañeros de trabajo, con los vecinos, familiares o amigos, la violencia intrafamiliar, el acoso y las violaciones sexuales.

Pero también son motivo de gran estrés, el tiempo, el clima y los fenómenos naturales, el ambiente familiar y laboral, el ruido, algunas noticias, la avería del coche, los exámenes escolares o la búsqueda de trabajo, la asistencia a lugares desconocidos, el conducir, las noticias y otros más.